El rábano picante (Armoracia rusticana), también conocido como rábano de caballo, rusticano y raíz picante, es una planta perenne de porte herbáceo. Pertenece a la familia crucífera, al igual que la mostaza, los nabos, el coliflor y la col. Se cultiva para el aprovechamiento de su raíz, por sus propiedades culinarias y medicinales.
Se cree que es de origen Ruso, específicamente del sur de Rusia, pero se naturalizó en todo el continente europeo. Se siembra con regularidad en regiones húmedas, específicamente en tierras sueltas. Crece también a orillas de los ríos, cerca de los cultivos, así como en los jardines de zonas urbanas y rurales.
Forma raíces grandes de color castaño en el exterior y blanca-amarillenta en el interior. Su sabor es ligeramente picante y se consume fresco o como ingrediente de diversos platillos.También tiene uso en la fabricación de dulces y mermeladas.
Características del rábano picante
El tallo del rábano picante alcanza los 100 cm de largo. Tiene aspecto de hoja, generalmente crece derecho y erecto, con ramificaciones desde la mitad hacia arriba.
Las hojas que salen de la base tienen forma de rosetas, con apéndice foliar alargado y grueso. Miden unos 60 cm. En tanto, las que crecen en el tallo son más pequeñas (10 cm a 15 cm), y su peciolo es corto. Los lóbulos del cáliz tienen aproximadamente 3 mm de largo.
Las flores del rábano picante son de color blanco, nacen en inflorescencias de tipo racimo, alcanzando 40 cm de largo.
Sin órganos foliáceos adicionales, el racimo floral es de eje corto. Los pedicelos de las flores son largos y salen a diferentes alturas del eje. Florece en junio, y da frutos en agosto.
Los frutos son de tendencia silicua, de forma ovalada oblonga, inflados, de 5 a 6 mm de largo, más cortos que el pedicelo, tienen nervaduras sin nervio central y los núcleos contienen cuatro semillas. El rábano picante se reproduce generalmente por la raíz, pocas veces por semilla.
Cultivo del rábano picante
El rábano picante es una planta que se adapta a gran cantidad de suelos, pero se desarrolla mejor en suelos franco-arenosos, profundos, con presencia de materia orgánica, buen drenaje y pH neutro.
Es resistente, capaz de soportar fuertes inviernos. Requiere temperaturas de entre 8 y 9 grados centígrados, y una precipitación aproximada de 600 mm anuales. No es muy exigente en cuanto a necesidades lumínicas, soporta estar en semisombra o con incidencia directa.
Reproducción del rábano picante
El rábano picante se reproduce normalmente de forma asexual, usando estacas de las raíces. Se necesitan estacas de 25 cm de largo y un milímetro de ancho como mínimo. Se recomienda sembrar en surcos de al menos 30 cm de profundidad, en lugares con presencia de sombra.
Las estacas de rábano picante se plantan en primavera o en verano, para cosechar en otoño-invierno, con una inclinación de 45 grados, y a una profundidad de unos 4 cm. Pasados dos meses, es posible desenterrar algunas raíces secundarias para la producción de más plantas.
Se sugiere desenterrar la raíz principal, para podar las raíces secundarias. Esto es para que la raíz central crezca larga, gruesa y con pocas ramificaciones. La cosecha se realiza a finales de otoño.
Usos del rábano picante
El rábano picante se cultiva principalmente para el uso de las raíces como alimento directo o como ingrediente de cocina. En algunos países la raíz se ralla y se procesa para crear una pasta, con un sabor muy similar al de la mostaza. Es muy popular en Francia, Argentina e Inglaterra. En Italia se emplea para hacer el famoso ràfanata, con huevo, queso pecorino y patatas.
En Japón el muy conocido wasabi en ocasiones es remplazado por la pasta de rábano picante, a la que se le añade colorante verde, debido a que el verdadero wasabi resulta mucho más costoso. Las hojas de esta planta también son comestibles y presentan un sabor muy similar al grelo.
La raíz del rábano picante está cargada de ácidos volátiles con cualidades antibióticas para tratar infecciones respiratorias y urinarias. Asimismo se emplea para sanar enfermedades cutáneas y aclarar marcas en la piel producidas por el acné o por pecas. Elimina el catarro ocasionado por enfermedades gripales y ayuda a aliviar el dolor en las articulaciones.
Propiedades beneficiosas
El consumo de té de rábano picante antes de dormir, ayuda a adelgazar de forma natural. El té se prepara de la siguiente manera: 10 gramos de rábano picante, 5 gramos de jengibre y 200 ml de agua hirviendo.
La piel de la raíz de rábano picante contiene sinigrina, que es un glucosinolato que evita el crecimiento de células cancerígenas y mejora el funcionamiento del sistema inmunológico de los seres humanos.
El consumo de rábano picante induce la producción de óxido nítrico en el cuerpo, y éste sirve como relajante de los vasos sanguíneos, por lo que favorece la reducción de la presión arterial y, por ende, merma los riesgos de enfrentar afecciones del corazón y las arterias.
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