Como chile jalapeño se conoce a una de las variedades del Capsicum annuum (pimienta o ají), que por tradición se produce en la ciudad de Xalapa, en el estado de Veracruz (México).
Forma parte de la división Magnoliophytas, clase Magnoliopsida, subclase Asteridae, orden Solanales, familia Solanaceae, género Capsicum, y especie Capsicum annuum.
Es una especie herbácea perenne, de color verde, que suele cultivarse de forma anual. Generalmente mide entre 80 y 100 centímetros de alto.
Florece de mayo a agosto, y el período de fructificación va de julio a noviembre.
Origen y características del Chile jalapeño
El chile jalapeño es muy cultivado y consumido en América, principalmente en el sur de Veracruz, en la cuenta del río Papaloapan, en la zona de Delicias, específicamente en Chihuahua, Nayarit, Jalisco, Sinaloa, Sonora y Chiapas.
El fruto del chile jalapeño se caracteriza por ser alargado y carnoso. Puede alcanzar los 7 centímetros de largo y los 3 centímetros de ancho en la base. Es firme, aromático, de buen aspecto y sabor, por lo que se ha consolidado como uno de los productos más buscados.
Se aprovecha antes y después de la maduración. Gran parte de la producción total de esta planta se destina al secado. Una vez pasado por este proceso, pasa a llamarse chile chipote o chile ahumado.
La intensidad del sabor del chile jalapeño depende del terreno en el cual se haya sembrado, así como de la semilla. Sin embargo, suele tener entre 2 mil 500 y ocho mil puntos, en la escala Scoville.
Cultivo del Chile jalapeño
El período de plantación del chile jalapeño tiende a comenzar antes de la estación húmeda. Es común que se coseche 70 días después de la siembra. El resultado suele ser de 25 a 35 frutos por cada planta.
Puede cultivarse cerca del nivel del mar o en un radio de 2.500 metros, por lo cual abarca varias regiones de México.
El proceso de siembra es muy fácil, y se adapta a diversos climas. La manera más fácil es a partir de las semillas, en tierras para macetas, nutriendo los brotes. Dependiendo de la zona, puede trasladarse al jardín, y el procedimiento puede explicarse paso a paso de la siguiente manera:
- Colocar entre dos y tres semillas en la maceta y llenarla con una pequeña porción de tierra. Es importante que el sustrato se mantenga húmedo, para que las semillas puedan germinar.
- Mantener en un sitio oscuro, hasta que comiencen a aparecer los brotes. Seguidamente, retirar la tapa del semillero y colocarlo sobre una ventana. A partir de ese momento, se debe regar de forma regular.
- Conviene mover constantemente el semillero, para garantizar que las plantas crezcan erguidas, ya que tienden a inclinarse hacia donde se encuentra el sol. Cuando tengan entre dos y cuatro hojas, se deben separar y colocar en una maceta de mayor tamaño.
- Mientras que no haya heladas, se pueden pasar las plantas al jardín, preferiblemente en un sitio que reciba sol durante-por lo menos-seis horas diarias. Se debe cavar un hoyo el doble del ancho de la maceta, con una profundidad suficiente para que la tierra llegue al nivel de las hojas. Las plantas se deben acomodar entre 30 y 40 centímetros de distancia.
- Regar una vez al día. Deben recibir unos 2,5 cm de agua semanalmente.
- Mantener el jardín sin malezas, ya que pueden absorber el agua que requieren los chiles jalapeños. Cuando tengan tres semanas en el jardín, conviene colocar compost de hongos o abono sobre ellas, para proveerles nutrientes adicionales.
- Después de tres o cuatro meses llega el momento de cosechar. Los chiles jalapeños deben tener una tonalidad verde brillante cuando estén maduros, es así como pican más. Se puede optar por dejarlos en la planta para que se pongan más dulces. Primero se pondrán negros, y luego rojos.
Tradición en torno al chile jalapeño
Por más de 500 años, el chile jalapeño ha sido un sustento alimenticio muy importante para los mexicanos. De hecho, se han encontrado imágenes en códices sobre piedra de diversas culturas prehispánicas, como la azteca, la zapoteca y la teotihuacana.
La evidencia más antigua del chile jalapeño en México data de los años 6900 y 5000 a.C. Se encuentra en la cueva de Coxcatlán, en la zona de Tehuacán, Puebla.
En la actualidad, al igual que el frijol y el maíz, continúa siendo uno de los ingredientes esenciales de la gastronomía de ese país. Se encuentra presente en el 90% de sus platillos, como ingrediente vital en salsas, moles, adobos, aderezos, rajas y picadas.
Información nutricional
Cada 100 gramos de chile jalapeño aportan 28 calorías, 0,4 gramos de grasa, 3 miligramos de socio, 248 miligramos de potasio, 7 gramos de hidratos de carbono, 2,8 gramos de fibra alimentaria, y 4,1 gramos de azúcar.
Proporciona al organismo Vitaminas A, B6, B12, C, y D en distintas cantidades; 15 miligramos de magnesio, 0,9 gramos de proteínas, 12 miligramos de calcio, y 0,3 miligramos de hierro.
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