Aunque en algunas culturas se le conoce como la “planta del dinero” o la “planta de la moneda, en referencia a sus hojas redondeadas, la Plectranthus puede ser cultivada como ornamento, verdura o tubérculo comestible. Incluso, puede emplearse para la elaboración de infusiones medicinales. Es fácil de cuidar y crece rápidamente.
La Plectranthus forma parte de la familia de las Lamiaceae, la cual reúne a gran cantidad de especies perennes y anuales. Sus diversos tipos están distribuidos en Japón, Australia, África Tropical, Asia y algunas en las islas del pacífico. Aunque no son de grandes dimensiones, pueden mantenerse como plantas rastreras o erguidas.
Vale decir que las Plectranthus están dotadas de tallos cuadrangulares, mientras que sus pequeñas hojas son opuestas. Por lo general éstas tienen márgenes aserrados (dentados) y agrupan sus flores en panículas. En algunas especies, la floración puede resultar muy llamativa, pero en otras pasar desapercibida. Sin embargo, en casi todas se distingue una forma tubular y bilabiada.
Variedades de Plectranthus
Existen alrededor de 1000 especies descritas para el género. Pero tan solo 325 son aceptadas. Al menos 650 solo son reconocidas como “similares” y unas 35 aún no están definidas como tal. Desde el punto de vista ornamental, las más usadas en la actualidad son:
- Plectranthus Oertendahlii: Proveniente de África, es un elemento colgante y perenne, con tallos rojizos y ramificados. Resulta muy llamativa a la vista. Sus hojas combinan un intenso matiz verde con blanco plata, mientras que sus hojas más viejas exhiben una coloración púrpura.
- Plectranthus Australis: Está localizada en Australia y destaca por su erguido porte. Es una mata siempreverde, que puede alcanzar un metro de altura. Tiene aspecto ceroso y un color verde profundo en sus hojas.
- Plectranthus Coleoides: Es común que no supere los 30 centímetros de altura. Es oriunda de Australia Oriental, Nueva Caledonia y las Islas Fidji. Inicia con porte erguido para hacerse colgante al final y sus hojas verdes lucen peludas, ovaladas y dentadas. Entre esa especie, el “Marginatus” es la más cultivada.
- Plectranthus Nummularius: Ubicada en Australia, su característica principal es su porte rastrero. Es muy popular para la decoración debido a la escala de verdes de sus hojas cerosas.
- Plectranthus Behrii: Se encuentra en Suráfrica. Resulta muy interesante como ornamento, debido a sus destellantes flores, dispuestas en largas espigas color rosado. Sus hojas son de un tono verde bronceado y al tacto tienen una textura arrugada.
- Plectranthus Saccattum: Dado que es rastrera, su especialidad es formar grandes alfombras, cuyas hojas verdes combina con florecillas pequeñas, de color azul – rojo. Es posible ubicarlas en Sudáfrica.
Cuidados para la Plectranthus
La Plectranthus es una planta fácil de cultivar, con ciertos requerimientos que no van más allá de la debida atención. Tome en cuenta que son plantas de rápido crecimiento, especialmente entre la primavera y el verano. Estos consejos podrían ayudarle:
- Temperatura: Habitualmente, prefiere temperaturas que oscilen entre los 18 ºC y 21 ºC. No obstante, durante el invierno la temperatura no puede disminuir a 10 ºC, pues no toleran las corrientes de frío. Tome en cuenta que aunque requiere mucha luz, no debe recibir sol de forma directa.
- Maceta: Un consejo frecuente para que la Plectranthus crezca saludablemente es colocarla en un cesto colgante. Adicionalmente, forre las paredes del contenedor con musgo u hojas de plástico, elementos que actuarán como aislamiento, permitiendo que se retenga la humedad.
- Riego: Es ideal que la planta de Plectranthus sea regada profusamente desde la primavera y todo el verano. Aunque, el mantillo debe permanecer mojado, más no con encharcamientos. Durante la época de frío, es importante evitar que la tierra se seque por completo, pero regando lo justo.
- Trasplante: No requiere ser trasplantada a menos que haya crecido tanto como para no tener espacio. Este procedimiento solo puede realizarse cuando la primavera esté bien avanzada. Jardineros experimentados sugieren utilizar jarrones de plástico, pero si hay oportunidad de adquirir uno de terracota, le vendrá mucho mejor a la planta.
- Abono: Mezcle el agua de riego con un material líquido, que verterá cada dos semanas. Use un poco menos de la cantidad indicada en el envase del fertilizante. Este procedimiento sólo se aplicará en la primavera, evite hacerlo en otras épocas del año. Este abono debe tener magnesio, potasio, boro, cobre, nitrógeno, fósforo y molibdeno.
- Florecimiento: suele suceder entre la primavera y el verano, pero dependerá de la especie. Algunas como la Plectranthus Oertendahlii proveen un gran espectáculo en ese sentido.
Hay más…
- Poda: si el aspecto de la planta es desprolijo, puede cortar la porción apical de las ramas más jóvenes para que su mejore. Este mecanismo permite que la planta produzca nuevas ramas, ayudando a que el resultado final sea una imagen más compacta. Cualquier utensilio debe ser esterilizado antes de tocar cualquier parte de la mata.
- Padecimientos: Puede suceder que las hojas de la planta empiecen a marchitarse de un momento a otro. Esto suele sugerir que no es regada con la regularidad requerida. Si al echarle agua esta no parece mejorar, es posible que sea demasiado tarde. Al contrario, si los tallos de la planta parecen más gruesos, es posible que estén por pudrirse, debido a exceso de agua. El equilibrio es vital.
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