De un enigmático color negro, fuerte aroma y un sabor un tanto ácido, la zarzamora es un fruto versátil que puede consumirse solo, en crudo, o acompañado con helado, yogur y nata. Además, es ideal para ser procesado en compotas, macedonias, pasteles, vinos y otras deliciosas preparaciones culinarias.

No solo su sapidez encanta a muchos, también se le atribuyen diversas propiedades beneficiosas para la salud, como combatir la diabetes, las anginas o las úlceras. Muchas de las sustancias que contiene tienen efectos anticancerígenos. Asimismo, su extraordinaria riqueza en vitaminas A y C, además de su contenido de potasio, la convierten en un diurético ideal. Su consumo proporciona una gran cantidad de fibra al organismo y es bajo en calorías.
Características de la Zarzamora
La apariencia de la zarzamora es poco común. Es una baya oscura y brillante, formada por la unión de múltiples frutos más pequeños, cada uno con una semilla en su interior. Perteneciente a la familia de las rosáceas, su nombre científico es Rubus Fruticosus, y el arbusto que las produce, conocido como zarza, crece silvestre en muchas regiones.
Los tallos de la zarza suelen desarrollarse erguidos, pero se extienden sobre el suelo con el paso del tiempo. Son aristados y algunos presentan espinas. Pueden alcanzar una longitud de hasta 4 metros y sus flores son blancas o rosadas, con cinco pétalos. Sus hojas son caducas y alternas, compuestas por 3-7 foliolos ovalados o elípticos con un interesante borde zigzagueante.

Esta planta posee raíces largas que crecen a poca profundidad. Sus brotes nacen con facilidad y pueden ser aislados para plantarse por separado en otro lugar. Su fruto es verde al inicio, luego se torna rojo, y una vez alcanzada la madurez total, obtiene su característica tonalidad negra.
Variedades de Zarzamora
La zarzamora puede crecer en solitario o agrupada en racimos, dependiendo de las condiciones climáticas. Esto sucede aproximadamente entre los meses de junio y agosto. Sus frutos crecen principalmente de manera silvestre. Entre las variedades más conocidas destacan la zarzamora común, la zarza de los rastrojos, la zarzamora enana y las moras Logan.
La zarzamora común, cuyo nombre científico es Rubus Ulmifolius, es la más tradicional y la que más se menciona. Se diferencia de las demás por la época en que germina y el sabor de su jugo. La zarzamora de los rastrojos, conocida científicamente como Rubus Caesius, produce frutos más pequeños que maduran antes que los de la zarzamora común. Por otro lado, la zarzamora enana, Rubus Chamaemorus, produce pequeños frutos dorados, ideales para mermeladas y pudines. Aunque pueden confundirse, la variedad Rubus Loganobaccus ofrece frutos más ácidos en comparación con las moras Logan, que suelen encontrarse enlatadas.
Origen y Distribución
El origen de la zarzamora se remonta a tiempos muy antiguos. Sus antecedentes se sitúan en Europa y Asia, aunque muchas especies tienen otros puntos de partida. La especie común es frecuente en el oeste y centro de Europa, así como en el norte de África. Se estima que fue conocida por griegos y romanos.

En cuanto a su producción, la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO) menciona que sus cultivos son muy requeridos por sus bayas, principalmente la especie común. Con un 72%, países de Asia como Turquía, China, Afganistán e Irán lideran el mercado de producción, seguidos por Europa. Otras naciones como Canadá, Estados Unidos, Rumania y México, compiten por un lugar destacado entre los productores.
Beneficios de la Zarzamora
Además de su delicioso sabor ácido, la zarzamora ofrece múltiples beneficios para la salud:
- Puede combatir efectivamente diarrea, gastroenteritis y cólicos menstruales.
- Malestar con fiebre: el néctar de este fruto no solo refresca y tonifica, sino que también revitaliza a quienes presentan debilidad.
- Afecciones en la faringe o laringe: es un aliado contra llagas e inflamaciones de las encías, así como contra estomatitis, faringitis y amigdalitis.
- Cuando los frutos están maduros, poseen un alto contenido de vitamina C, lo que ayuda a mejorar resfriados, tos y constipaciones.
- Actúa como astringente.
- Su poder diurético evita la retención de líquidos.
- Desinflama y protege la piel.
- Mejora las hemorroides.
- Previene el reumatismo.
Aspectos del Cultivo
A pesar de que la zarzamora proviene de una planta silvestre, es posible cultivarla. Se da en climas templados y húmedos, aunque no todas las variedades sobreviven a la sequía. Un poco de calor a principios del verano es aprovechado para su completa maduración.
- Los suelos de bosque, húmedos y bien drenados, son apropiados para ella, aunque no es muy exigente.
- Es importante dar soporte a los tallos para evitar que toquen el suelo y se enreden, facilitando así la recolección. Este procedimiento se llama entutorar.
- Cuando la zarza da sus frutos, generalmente se seca. Por ello es vital remover las ramas muertas. La poda de invierno ayuda a adelantar los brotes.
- La multiplicación de la zarzamora no presenta inconvenientes, ya que al mantenerse al ras del suelo se disemina fácilmente. El riego debe ser constante pero moderado. Se recomienda el riego por goteo para lograr una mejor floración y cuajado del fruto.