Nyctaginaceae 2
Mirabilis jalapa
Se le conoce popularmente como dondiego de noche, periquito, maravilla del Perú o clavellina. La Mirabilis jalapa pertenece al género de las Nyctagineae y existen unas 50 especies. Como uno de sus nombres indica, es oriunda de Perú, pero poco a poco logró extenderse por todo el mundo, especialmente en las zonas tropicales y en gran parte de Europa, donde entró a través de España.
La buganvilla
Admirada por el impresionante espectáculo que ofrece durante su floración, la buganvilla es una planta trepadora reconocida mundialmente bajo diversos nombres. En México y España, se le llama buganvilla; en Argentina, Uruguay y Paraguay, es conocida como Santa Rita; mientras que en Perú, Colombia y Ecuador, se le denomina buganvilia. Su nombre científico es bougainvillea. Esta planta tiene su origen en los bosques tropicales y húmedos de América Central y América del Sur. Aunque existen 35 especies descritas en esta familia, solo 18 son aceptadas actualmente.
La buganvilla es muy apreciada no solo por su belleza, sino también por su capacidad para adaptarse a diversos climas, lo que la convierte en una opción ideal para jardines y espacios exteriores en regiones cálidas. Esta planta no solo ofrece un espectáculo visual, sino que también puede proporcionar sombra y privacidad cuando se utiliza adecuadamente en pérgolas o muros. Además, sus flores, aunque comúnmente se confunden con las brácteas de colores vibrantes que la rodean, son pequeñas y blancas, situadas en el centro de estas estructuras coloridas. Estas características la hacen una planta versátil y muy valorada en el paisajismo.
Características de la Buganvilla
La buganvilla es un arbusto de características perennes y trepadoras, capaz de alcanzar hasta 12 metros de altura. Es muy apreciada para cubrir muros, pérgolas y cercos debido a su capacidad para extenderse y cubrir superficies con sus frondosas hojas. Gracias a un sistema de espinas afiladas, la buganvilla se adhiere a otras plantas o estructuras a su paso. Además, mediante la poda, se le puede dar forma de arbusto redondeado, lo que la convierte en una opción popular para la ornamentación de jardines.
Al observar estas plantas, podemos notar que poseen tallos robustos capaces de crecer en diversos tipos de terrenos. A medida que sus ramas se desarrollan, se aferran a su entorno mediante espinas que poseen una sustancia cerosa negra en sus puntas, lo que mejora su adherencia. Para facilitar que la buganvilla se extienda por los muros, es común instalar guías de alambre que dirigen sus ramas.
Las hojas de la buganvilla tienen un intenso color verde, se presentan de forma alterna y son de constitución simple y ovalada. Estas hojas miden entre 4 y 10 cm de largo y entre 2 y 4 cm de ancho.
Lo que más destaca de la buganvilla, conocida también como Santa Rita, es la belleza de sus colores. Sin embargo, es importante señalar que lo que comúnmente denominamos flores, en realidad no lo son. Se trata de brácteas, que son hojas modificadas con aspecto similar al de las flores, y que rodean las verdaderas flores, las cuales son pequeñas y de color blanco.
Cultivo de la Buganvilla
Para aquellos interesados en embellecer sus muros o cercas con la vibrante buganvilla, es fundamental seguir ciertas precauciones para asegurar un cultivo exitoso. Esta planta, conocida por sus deslumbrantes colores, requiere algunas condiciones específicas para prosperar adecuadamente.
El método más adecuado para la multiplicación es a través de esquejes. Inicialmente, es esencial seleccionar un lugar donde el suelo mantenga buena humedad y reciba luz solar directa. Dado que la buganvilla es originaria de climas cálidos, se beneficiará enormemente de la exposición directa al sol, lo que resultará en un despliegue impresionante de colores.
Para llevar a cabo la propagación por esquejes, se recomienda optar por esquejes de madera dura. Antes de plantarlos en su ubicación definitiva, es importante realizar un proceso de enraizamiento. Para ello, se debe preparar un almácigo compuesto de arena y turba. Además, es aconsejable impregnar las puntas de los esquejes con hormonas de enraizamiento, fácilmente disponibles en viveros.
Colocar el almácigo o las macetas con los esquejes en un ambiente controlado, que ofrezca condiciones óptimas de humedad y luz, es crucial. Este entorno controlado facilitará el enraizamiento. Tras unas semanas, los esquejes habrán desarrollado raíces y estarán listos para ser trasplantados a su ubicación definitiva.
- Consejo: Asegúrese de que el lugar final tenga un buen drenaje para evitar el encharcamiento, lo cual podría dañar las raíces.
- Ejemplo: En regiones con inviernos fríos, considere cultivar la buganvilla en macetas para poder trasladarlas a interiores durante las bajas temperaturas.
Cuidados de la Buganvilla
La buganvilla es conocida por su rusticidad, lo que implica que no requiere cuidados excesivos. Sin embargo, al ser originaria de regiones tropicales y húmedas, hay ciertas condiciones que deben considerarse, especialmente en áreas donde predominan los climas fríos durante ciertas épocas del año.
En regiones de clima frío, es recomendable proteger las buganvillas durante el invierno cubriéndolas con una lona plástica y colocando un manto de paja seca en la base para resguardar el tallo y las raíces. Esta protección es crucial, ya que la buganvilla solo puede soportar temperaturas de hasta -3°C.
El riego de esta planta varía según la estación. En verano, las buganvillas plantadas en el jardín deben regarse una vez por semana, asegurándose de que el suelo tenga un buen drenaje para evitar el encharcamiento. En invierno, el riego es casi innecesario, a menos que el suelo esté seco debido a la falta de lluvias; generalmente, las precipitaciones son suficientes.
La poda de la buganvilla debe realizarse en invierno en climas cálidos y a principios de la primavera en zonas frías. La poda fomenta un crecimiento vigoroso y ayuda a modelar la planta. Los cortes deben hacerse por encima de una yema o un brote nuevo, eliminando los tallos débiles y largos. Durante el verano, es importante retirar las flores marchitas para mantener la planta saludable.
Las plagas más comunes que pueden afectar a la buganvilla son las cochinillas, pulgones, arañas rojas y moscas blancas. Para cada plaga existe un tratamiento adecuado y medidas de control. Identificar correctamente la plaga es fundamental para aplicar el tratamiento adecuado y disfrutar de ejemplares sanos que añadan un colorido especial a nuestros jardines.